lunes, 4 de noviembre de 2013

Quizás nos queríamos igual que bailábamos; con miedo a pisarnos.

Día 1:
Todas las puertas estaban abiertas, y cuatro prendas de ropa aún estaban tiradas por ahí, con descuido, de cualquier manera, en el parqué, repartidas sin orden.
Cualquiera diría que lo que acababa de pasar no era más que una noche de esas de pasión, tipo película, en la que sobran las palabras. Y la ropa. Y tampoco habría sido tan raro.
Podríamos poner un huracán, un terremoto, un tsunami, una catástrofe cualquiera; suficiente para llevárselo todo por delante. Incluidos nosotros.
Cariño. Nunca te dije que odiaba la canción que siempre, siempre, cantabas. Esa con ritmo ochentero. Siempre era la misma.
Pero el silencio de ahora es infinitamente peor...
A veces me parece oír un portazo. El portazo. Una y otra vez. Pero no hay nada,
no queda nada.

Día 2:
Hiciste las maletas tan rápido... Empaquetaste dos años de vida compartida en un suspiro y medio. Cualquiera diría que estaba todo pensado, que todos esperaban este día. Incluso tú.
Y aún así sigo encontrando cosas. Cosas pequeñas, eso sí. Las he ido dejando en el mueble de la entrada.
Ya sabes... Por si vuelves.

Día 3:
Acabo de joder la aspiradora.
¿Recuerdas? Todos los domingos me despertabas con el sonido de aspiradora, a través del cual apenas se entreoían un par de palabras de la canción que sonaba en la radio.
¿Para qué la encendías mientras pasabas la aspiradora, cariño? Era imposible oír nada con ese estruendo. Déjalo. Ya no importa. Ya se ha perdido todo; hasta eso.
Cuando terminabas de pasar la aspiradora, siempre me la pasabas y me pedías que la guardara yo, siempre tenías una escusa. Unos días estabas cansada, otros tenías prisa, otros sonreías y sabías que eso bastaba. Hoy he sacado la maldita aspiradora del maldito armario en la que la había guardado quinientas veces antes, pero ni siquiera he conseguido encenderla.
Creo que te echa de menos...
Yo también.

Día 4.
Hoy al salir del trabajo he pasado por el restaurante que tanto nos gustaba y que siempre estaba tan lleno. Compré comida para dos y saludé al entrar en una casa que ahora está vacía.
Debo de ser gilipollas.

Día 5.
Me he encontrado con la vecina del quinto. La que se queja tanto y nunca nos ha caído bien. Me ha preguntado qué tal estás; dice que hace mucho que no te ve.
No me extraña.
Yo también hace mucho que no te veo,
seguro que estás bien.

Día 6.
Me gustaban tus ojos, no sé si porque eran tuyos. Siempre pensé que el mundo a través de tus pupilas tiene que ser más bonito a la fuerza.

Día 7.
Voy tachando días en el calendario y ni siquiera sé qué cojones estoy esperando. Uno, dos, tres. Se me acumulan las cruces rojas, ¿y qué?
Hoy tenía dentista y tú no vas a acompañarme, aún hay una mesa reservada para nosotros mañana por la noche, mi madre nos espera para comer, la vecina del quinto se muere de ganas de ver mi nombre solitario en el buzón. Yo que sé. Las cosas han cambiado demasiado, no puedo acostumbrarme.
No me pidas que lo haga.

Día 8.
No puedo.

Día 9.
Voy a buscarte.

Vivo en un constante siete. No se lo digas.

10 comentarios:

  1. Dime que tienes Twitter, o algo así, juuuu *_*

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    1. ¡Claro! De hecho, tengo dos. Uno personal, otro más del blog. Puedo darte el que quieras :)

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  2. Mira más fácil, el mio es Vanee_nessii y asi me agregas con los dos :$

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  3. Qué sorpresa tan agradable en esta mañana de lluvia...He llegado a tu blog cuando buscaba una imagen en Google yyyyy he quedado atrapada en él jajajaja Tienes Twitter o Facebook para poder seguirlo?

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    1. Tengo el mío personal y otro que es más bien... "Frases", llámalo x. El personal es @Marina_zamora20, y quieres puedo darte el otro también.
      ¡Gracias por pasarte!

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  4. Gracias a ti! Ya te sigo, soy @tikiPaoPao. Si quieres decirme el de las frases para seguirte también por allí. Lo que escribes es de tu cosecha, recabas de aquí y de allá, o una mezcla de ambas? En cualquier caso, me encanta;)

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    1. Vale, ¡ahora te sigo!
      Mmm... Es todo de mi cosecha. Pero a veces una frase, una película, un libro... Me inspira. No sé si me entiendes. Aunque, por lo general, excepto alguna frase de los márgenes, todo lo que hay escrito en mi blog es mío.
      ¡Muchas gracias!

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  5. Pues...escribes increíble! Nos vemos por aquí ;)

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