domingo, 26 de agosto de 2012


-Ya sé que no puedo llamarte sin más y decirte que te echo de menos.
-No, no puedes.
-Lo sé. Te hice daño y lo siento, no sé por qué desperdicié tanto tiempo fingiendo que no me importabas. Supongo que no quería sentir esto. . . Duele. Pero te quiero, estoy enamorada de ti y me da igual que tú creas que ya es tarde, te lo tengo que decir. . . Di algo, por favor.
-Espera, no te muevas. . . Quiero que sepas que si te acercas más a mí, ya nunca te dejaré ir.

1 comentario: