miércoles, 26 de septiembre de 2012

The way you kissed me.

Dormir es una buena solución cuando quieres desconectar de todo. Cuando estás encerrada en tu habitación y ni siquiera la música sirve para evadirte. Te has sentado a leer, pero lo que los personajes del libro viven, sienten y se dicen, es precisamente con lo que tú sueñas, y así no consigues despejarte de aquello que llevaba persiguiéndote toda la mañana. Luego te pusiste a hacer los deberes, pero tu cabeza estaba a varios kilómetros de distancia. Y más tarde, te pones a estudiar. ¿Para qué? Sólo conseguiste pasarte media hora dibujando corazones en el margen. Mírame, soy absurda. Lo mires por donde lo mires. Parece que necesito necesitar a alguien. Y de repente, un nudo en la garganta. Ganas de enterrarme bajo almohadas. Creo que fue entonces cuando decidí dormirme. Cuando estás dormida no piensas, solo sueñas, y yo ni eso. Solo quería preguntar si esto va a ser siempre. ¿Esto no va a cambiar, siempre tiene que ser lo mismo? Una y otra vez, la misma historia.¿Cómo era eso? Enamorarme de alguien imposible es mi estupidez favorita.
[Yo no estoy enamorada. No lo estoy y no lo pienso estar. No volveré a insinuar algo así, no volveré a equivocarme con lo mismo. No lo estoy y punto.]

Ese momento, cuando me abrazaste tan fuerte que parecía que no querías soltarme. Ojalá no me hubieras soltado.


2 comentarios:

  1. mejorr nos acostamos a dormir... pero siempre hay que levantarse ,, y despertar y hay sigue la vida


    saludos...

    ResponderEliminar
  2. Gracias por pasarte y por dar tu opinión. Besos.

    ResponderEliminar