sábado, 30 de junio de 2012

Sentir tus latidos junto a los míos...Oh, que perfecto sería.

Hoy, en la playa, no he podido evitar escribir tu nombre junto al mío en la arena, y lo único que pensé antes de que una ola se llevara nuestros nombres era que ojalá estuvieras aquí. Y de repente ocurre, algo se acciona. Pensé que tu nombre queda genial junto al mío, y que si tan solo pudieras verlo, si sólo te dieras cuenta de que te quiero, si un "nosotros" fuera posible... Y de repente ocurre, algo se acciona. Lo que quiero decir, es que sería feliz. Más feliz de lo que me siento cuando te veo, cuando te tengo cerca... Más feliz que nunca en mi vida. Y de repente ocurre, algo se acciona. Pienso que hay muchas cosas que no sabes. Como que me enamoré de ti aquel 30 de marzo, con una sola sonrisa, que probablemente ni siquiera iba dirigida a mí. Y de repente ocurre, algo se acciona. Pero lo que básicamente quiero que sepas, es que te quiero. Y de repente ocurre, algo se acciona. No sé como he podido llegar a quererte tanto en tan poco tiempo. Se me acumulan los días sin verte, sin hablar contigo, sin saber nada de ti. Porque no te conozco, y casi ni me acuerdo de tu cara, pero se ve que no me hace falta. Yo te quiero así, mi perfecto desconocido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario